viernes, 9 de septiembre de 2011

Los Despropósitos del Decath...


Vivan las empresas que empujan el surf, sin su ayuda muchas personas no conocerían ni tan siquiera el deporte de deslizarse por la pared de las olas. Lástima, mucha lástima me produce ver a unos chicos (vestidos de arriba abajo de la ya conocida marca TRIB...), aprendiendo a surfear, protestando en el agua como auténticos profesionales, cabreando a todo el personal, incluso uno de ellos llevaba un collar hawaiiano, para no desentonar en el mediterraneo. Me centro, los tipo en cuestión no tendrían más de 14 años, aunque ganas de reventarles la cara me quedaron, interpusieron su decisión de coger olas junto con el trillon de personas a montonadas en 250mts de playa y olas de 1/4 de metro raras pero echas en la orilla, total que al final de todo uno de esos chavales le da la vuelta a la tabla y cual es mi sopresa que el tío llevaba las quillas al revés, es decir la punta de la quilla en vez de mirar a la cola miraban a la punta de la tabla... joder, me aguante la carcajada, después de todo estaban aprendiendo... - oye, donde te pusieron las quillas-...-pues en el Decath...-...-pues con esas quillas podrás hacer cutbacksretrogirados..- cara de poker del chaval, giro mi tabla, el tío la mira, ostias sorpresa... Debo estar viejo para esto del surf, pero hay una cosa cierta, al final de todo el proceso surfístico vivido llego a una conclusión importante: ésto del surf cada vez da más pena, y se que todos nos equivocamos, incluido el que escribe. Después de haber disfrtudo de unos días en Tapia de Casariego (por fin conocí a Robert Gulley en persona, lo reservo para otra entrada más constructiva), y disfrutar de la olas junto con los locales, buena gente, sin problemas, buen surf, aglomeraciones mínimas y olas fuertes, en el norte no hay tanta tontería y los chavales surfean y punto, cogen olas, juegan a fútbol y disfrutan del mar. El mediterraneo no perdió su encanto, pues en invierno ese encanto aparece como por arte de magía, eso sí, sin gente con colgantes hawaiianos.