viernes, 28 de enero de 2011

Espeso Césped LLeno de Seres.



Los pasos acelarados de los individuos inciden directamente en su progresión radial. Ciertos humanoides, con sus malformaciones mentales incluidas, aseguran su protección con escasos deseos de aprender. La relevancia en si no tiene precio, los paseos del ingenio y la destrucción masiva acompañan a nuestra orquesta diaria, la orquesta que escucho desde el corazón de las personas. Lascivas contorsiones a los que nos someten, esos gigantes, que dicen no tener suficiente, que dicen no haber llegado a su techo, que quieren más. Más de tu sangre, de tu esfuerzo, no te quieren aislado, te quieren acorde con lo establecido. Llega el día, la noche y entonces en un aliento de masturbación mental inquietante empiezas a sorprenderte de la incapicadad moral. Incapacidad moral, que acaba en tristes lloros y orquestas desafinadas. Sabéis una cosa... Aquí nadie sabe nada y si lo saben no lo quieren decir. Agur companys.

jueves, 13 de enero de 2011

Cerca de Nuestro Trasero.




En contadas ocasiones, quizás por un suspiro, una intuición... un olor penetrante que atraviesa de mar a tierra, que focaliza tus sentidos; decides poner rumbo no fijo, al principio fue muy fustrante, pero a medida que la carretera desdibujaba los elementos asfálticos más perversos, la mente cobró claridad que no clarividencia. Recorrí montañas, parques naturales, aún a sabiendas que no encontraría a nadie. Dejo documento gráfico, de unos de los días que lo arriesge todo, dejando atrás lugares que estaban funcionando muy bien. No siempre cuadra, no siempre es así. Pero aquel día, tuve fruto. Perseguir es encontrar, encontrar es descubrir. Vivir, no más.

miércoles, 12 de enero de 2011

El pez que se muerde la cola




Son las ocho de la mañana del 9 de Noviembre del 2007, la marejada se deja vislumbrar tras los primeros rayos de sol. Me pongo el traje, realizo los estiramientos diversos y me lanzo al mar. Las olas arrancaban con fuerza desde arriba, en la orillera, se ponía un poquito más hueca… Sorpresa, sorpresa… cuando en una de las olas, bajo agresivo, arranco como un cohete hacía la pared de la ola y de repente pego una frenada en seco, como si me hubiera chocado con una roca, del golpe, asustado recojo la tabla desde el invento y cuando le doy la vuelta me encuentro este pescado enganchado en una de las quillas… Es difícil, pero que muy difícil que se de un echo de esta manera, pero yo flipé más que ninguno, aunque los que fliparon de verdad fueron los pescadores que no daban crédito, pues todavía no habían cogido nada. Yo salí entre impresionado y… por la noche la cena fue pescado al horno con patatas. De testigo mi mujer...

viernes, 7 de enero de 2011

La Montañeta



Hay lugares que se encuentran en otra dimensión. Miré a mi alrededor... y allí estaba aquella palmera, rodeada de su césped verde y fresco. Mi mente vislumbró una escena pasada, otra dimensión que no existe pero que a la vez está ahi, en mi recuerdo. Ni bueno, ni malo... sino mejor. Aquella palmera fue testigo de algo más que dos compañeros compartiendo apuntes de inglés. Y ese instante, ese minuto, aquel mediodía, esa situación, el olor a césped me devolvió de nuevo a un presente mejor. El pasado está ahí, el futuro no importa. Sólo importa el presente. Pero el instante de mi recuerdo me refuerza en un principio, que en ocasiones, los humanos perdemos; la capacidad de sentir, pasión, por las personas, por las cosas. Y cada vez que paso por la Montañeta, los recuerdos se disparan como cohetes encendidos, como luces poseidas con fuerza suprema, como olas rompiendo, como gente mirando, como se acelera mi corazon (estoy escribiendo a 300 pulsaciones x minuto), me sale del corazón, el tio que escribe esto... Da igual, la escritura es comunicación, pero para mi es PASION.

domingo, 2 de enero de 2011

Si las espumas del mar hablasen...





Seríamos testigos de nuestras propias indecencias, de los que filtrearon con el surfing y lo dejaron, de los que continuamos agobiando al personal con todo tipo de artimañas sucias, envenenadas. Sesiones pasadas, olas surfeadas, atardeceres, amaneceres, mar plato, mar plato, olas otra vez, visitas al psicólogo para desmembrar todas las secuelas que produce el mediterraneo. Algunos viajes, anécdotas variadas (joder como cuesta hacer un resumen del año), en fin todo un mundo sin fin. Pero lo más bonito de todo y después de tantos años de agua salitrificada (esta en las venas, sin duda), es la última sonrisa después de trazar una ola, o el chiste del colega, y de la toma de anís antes de ir al agua gélida. Tantas sensaciones no se pueden resumir en cuatro líneas blogueras de tan extraño y excéntrico blog. Valorando lo más significativo, es que estamos en vida un año más, lo que supone: pagar impuestos, trabajar, hacer el amor, surfear, estudiar, ver la tele, escribir en el blog, observar las previsiones, ver a los colegas y amigos, comer, beber, dormir, levantarse, lavarse la cara, leer, mirar el cielo, tocar la lluvia, acariciar las plantas, regar las plantas. El próposito para este año nuevo... sin duda seguir SUBSISTIENDO, que no es poco. Feliz 2012 (es que el 2011 no me gusta como número...).